Esquizofrenia

 Según un estudio de la OMS, la esquizofrenia es una enfermedad grave que se inicia en la adolescencia tardía o en los primeros años de la edad adulta. Se caracteriza por distorsiones fundamentales en los procesos de pensamiento y percepción y por alteraciones de la afectividad. El trastorno afecta a las funciones más esenciales que confieren a las personas normales es el sentimiento de individualidad, singularidad y autodirección. El comportamiento puede estar gravemente alterado en algunas fases de la enfermedad y acarrear consecuencias sociales adversas. La firme creencia en ideas falsas y sin ninguna base real es otra característica de este trastorno.


Esquizofrenia sigue un curso clínico variable, con una recuperación sintomática y social completa aproximadamente en una tercera parte de los casos. Sin embargo, puede seguir una evolución crónica o recurrente, con síntomas residuales y una recuperación social incompleta. En el pasado, los pacientes con esquizofrenia crónica constituyen una gran porción de los internados en hospitales psiquiátricos, y así sigue siendo allí donde persisten esas instituciones. Gracias a los progresos actuales en el fármacoterapia Y asistencia psicosocial, puede esperarse una recuperación plena y duradera para casi la mitad de los individuos que desarrollan esquizofrenia. Del resto, solo la quinta parte aproximadamente sufre graves limitaciones en sus actividades cotidianas. La esquizofrenia afecta más o menos por igual a hombres y a mujeres, aunque en estas tiende a comenzar más tardíamente y a tener una evolución y un pronóstico más favorable. Informe Hebe de 2000 registra una prevalencia puntual de 0,4 % para la esquizofrenia, enfermedad que causa un alto grado de discapacidad. En un estudio reciente sobre la discapacidad asociada a las enfermedades físicas y mentales en 14 países, la población general sitúa la psicosis activa en tercer lugar en la relación de trastornos más discapacitantes, por encima de la paraplejia y la ceguera.

En el estudio sobre la carga mundial de morbilidad como la esquizofrenia era responsable del 1,1 % del total de AVAB y del 2,8 % de los A.P.D. también el costo económico de la esquizofrenia para la sociedad es elevado. Se ha estimado que en los Estados Unidos ascendió en 1991 a 19.000 millones de dólares en gastos directos, y a 46.000 millones de dólares en pérdidas de productividad. Incluso después de que los síntomas más evidentes de este trastorno hayan desaparecido, pueden persistir algunos síntomas residuales Tales como falta de interés iniciativa en las actividades laborales diarias, incompetencia social y incapacidad para interesarse por actividades placenteras.

Estos síntomas pueden ser causa de una discapacidad constante y una mala calidad de vida, además de constituir una carga considerable para las familias. Se ha demostrado repetir damente que la esquizofrenia sigue un curso menos grave en los países en desarrollo. Por ejemplo, en uno de los estudios internacionales multicéntrícoos, la proporción de pacientes en remisión total a los daños era del 63 % en los países en desarrollo, frente al 37 % en los que están en vías de desarrollo.Aunque se ha intentado justificar este mejor pronóstico por la existencia de apoyos familiares más firmes y menos exigencias a los pacientes, no se conocen con exactitud la razones de estas diferencias. Un número considerable de esquizofrénicos intenta suicidarse en algún momento de la evolución de su enfermedad.

Un estudio reciente demostró que el 30 % de los pacientes con este diagnóstico habían intentado suicidarse al menos una vez en su vida, y aproximadamente el 10 % de las personas con esquizofrenia consuman al suicidio.

A nivel mundial, la esquizofrenia reduce la Esperanza de Vida del individuo en una media de 10 años.

Algunos síntomas pueden ser:

  • Forma irracional de pensar.
  • Forma irracional de actuar.
  • Combina estados irracionales con comportamientos normales.
  • Falta de comunicación con los demás.
  • Falta de concentración.
  • Delirios.

En algunos casos, a la típica irracionalidad de pensamientos y de conducta se sumo el retraimiento; en otros, una marcada en capacidad de comunicación con los demás, sin que intervengan grosería ni exabruptos. En algunos pacientes es notoria la falta de concentración, hasta el extremo de que no logra entender un programa corriente de televisión o una conversación normal. En otros casos, los sujetos parecen delirios, en diversos grados y tipos: algunos creen oír voces, otros dicen tener la mente ocupada por los pensamientos de algún pariente muerto y otros declaran ser objeto de una persecución constante.

Comentarios

Entradas populares

MATERIALES MAGNETOREOLÓGICOS Y FERROFLUIDOS

LA CLONACIÓN TERAPÉUTICA

¿PODRÁ LA NANOMEDICINA CURAR EL ALZHEIMER?